Panistas ardidos

"El progreso consiste en renovarse"

Miguel de Unamuno, escritor español

Los panistas más tradicionalistas se sienten traicionados. Y no es para menos, pues lo que algunos de los mismos azules llaman "imposición", no es más que el resultado de una serie de modificaciones legales a los estatutos del propio partido, que impulsaron algunos militantes nacionales que ya han pasado a mejor vida, pero apenas hace un par de años.

Fue en abril del 2008, cuando panistas como Juan Camilo Mouriño, en aquel entonces Secretario de Gobernación del gobierno de Felipe Calderón y el mismísimo Carlos Abascal Carranza, quien a pesar de su avanzada enfermedad impulsó la apertura de los estatutos para permitir las candidaturas que surgieran de encuestas y sondeos, así como de candidatos externos con un aliado incondicional: César Nava Vázquez.

Fueron estas reformas que se aprobaron durante una reunión del Consejo Nacional del PAN en el Auditorio Nacional, las que permitieron no sólo las candidaturas de políticos externos como los ex priístas Magdalena Peraza Guerra en Tampico y José Luis Vargas Ortega en Altamira, sino también las tan criticadas alianzas opositoras en diversos estados del país de "todos contra el PRI".

Todo esto en apenas un par de años, ha dejado a muchos de quienes tradicionalmente han formado parte de las filas de Acción Nacional "fuera de la jugada", por lo que piensan que se trata del "dedazo" que tanto le criticaron al PRI en su momento.

La manifestación de ayer de cientos de panistas en contra de la dirigencia nacional de su partido en Tampico es en ese sentido, aún y cuando la solución de la actual dirigente interina Rosario González fue la más fácil: echarle la culpa al PRI.

Se trata de acarreados que recibieron cien pesos y una despensa, declaró la lideresa panista a los medios luego de que a gritos exigían la salida de Magdalena Peraza Guerra de la candidatura panista y hasta amenazaban con tomar las instalaciones. Fue la salida más sencilla la que encontró González, al acusar que sólo había un par de militantes entre los cientos de personas que afuera de Acción Nacional protestaban.

Lo que no supo la dirigente panista, es que la mayoría de esos inconformes mostraron su documentación que los acredita como militantes del PAN y hasta enseñaron sus recibos de pago de cuotas al partido.

Ya de por sí los albiazules estaban divididos y el fantasma del abstencionismo se cierne sobre el proceso electoral; si la negación será la estrategia del PAN, en lugar de admitir que tienen una grave escisión en sus filas, de antemano pueden ir calculando la derrota en las urnas el próximo cuatro de julio.

 

CAMPAÑA NEGRA CONTRA EL PRI

Se comienza a ver en Veracruz y Tamaulipas ya podrá ir poniendo sus barbas a remojar. Fue el candidato del tricolor a la gubernatura jarocha Javier Duarte de Ochoa quien denunció la "campaña negra" que el gobierno federal ha iniciado en contra de su candidatura apoyándose en una estrategia vil: el recorte de participaciones a los municipios gobernados por el PRI.

“Hay de campañas negras a campañas negras, hay unas que no tienen efectos, que se quedan en la rumorología, pero las que sí nos preocupan son aquéllas que buscan afectar el desarrollo de los estados, y ahí sí hay que defenderse porque la Federación no tiene argumentos para recortar ni retrasar los presupuestos que la Cámara de Diputados aprobó para que los estados y los ayuntamientos reciban sus ministraciones mensualmente”, dijo textualmente Duarte como un llamado a tiempo para que el gobierno de Felipe Calderón no meta las manos en las contiendas electorales en puerta.

 

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