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¡Imagínese!

Contrastes

Mario Alberto Gámez

 

“Lo que se les de a los niños,

los niños darán a la sociedad”

Kart A. Menninger, psiquiatra estadounidense

 

 

 

Hace algunos meses comentamos las pésimas condiciones en las que estudian cientos de alumnos de escuelas primarias y secundarias en el municipio de Altamira, en donde no hay escuelas en forma y los estudiantes deben tomar clases bajo un árbol o en improvisadas aulas de madera.

 

A la fecha no se han visto avances por parte de las autoridades del municipio, del gobierno del estado o de la federación, para que a través de la Secretaría de Educación Pública, de la Secretaría de Educación y Cultura o de la Dirección de Educación aporten recursos y ayuda para que estos alumnos puedan recibir su instrucción básica en condiciones al menos dignas.

 

De hecho aún no nos recuperábamos de estos casos cuando ahora nos enteramos de que la Escuela Secundaria Técnica No. 88, que alberga a cientos de estudiantes se encuentra en similares circunstancias.

 

Lo más curioso es que sería hasta cierto punto comprensible ver una escuela de muy bajas condiciones en algún ejido o zona apartada de Altamira, pero en el caso específico de esta secundaria... ¡está en Tampico!

 

Se encuentra en la colonia Luis Donaldo Colosio y ya lleva operando al menos dos años con alumnos en hacinamiento de a dos grupos en improvisados salones de madera y bajo unos humildes techos al aire libre, en donde sufren de las condiciones climatológicas y de la distracción de los factores externos que no les permiten un buen grado de concentración.

 

Un cuartucho de madera sirve a la vez como dirección y cooperativa escolar; es decir todos los trámites administrativos, archivos y documentos escolares, bien se pueden mezclar con cualquier cantidad de comida chatarra, otro grave problema de alimentación de los menores.

 

Sería muy bueno que la rifa de alguno de los vehículos Hummer que la lideresa vitalicia del sindicato magisterial Elba Esther Gordillo se destinara para la construcción de algún espacio digno para estudiar en Tampico...¡imagínese!

 

mario.gamez@milenio.com

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