Muerte segura en Tamaulipas

"Vivimos en una época peligrosa. El ser humano ha aprendido a dominar la naturaleza mucho antes de haber aprendido a dominarse a sí mismo"

Albert Schweitzar, Filósofo, médico y escritor alemán

 

Recorrer la zona conurbada del sur del estado o la extensa frontera de Tamaulipas, puede ser uno de los paseos turísticos indispensables para quienes quieren conocer la geografía nacional y enamorarse del sabor que ofrecen su excelente gastronomía y los hermosos paisajes del Tampico antiguo con su centro histórico, o de la blanca y suave arena de las azules aguas de de las playas de Ciudad Madero y Altamira.

Si se visita la frontera es casi obligado el recorrido por los diferentes centros comerciales de la frontera del sur de Texas, además del turismo especializado que encuentra en ranchos del norte del estado una oportunidad para la cacería y la pesca deportiva. ¿Quién pudiera pensar que detrás de tal panorama se esconden algunas de las regiones de mayor contaminación del país?

De acuerdo con un estudio del Instituto Nacional de Ecología, Altamira, es la ciudad de mayor contaminación en Tamaulipas y una de las 15 ciudades del país con mayor polución que envenena sus cuerpos de agua, su aire y su medio ambiente, matando lentamente a su flora, fauna y lo más grave: a sus pobladores.

Los niveles de plomo que se encuentran en el sur del estado y la contaminación que emana de la industria establecida en la frontera norte, van mermando la salud de los tamaulipecos de manera tal, que los casos de cáncer se han disparado considerablemente en las últimas dos décadas, lo que deja en jaque a la gente que vive y que trabaja en una zona que además ahora es azotada por la inseguridad.

El sur de Tamaulipas es un caso grave de la contaminación que se presenta, pues la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente ha confirmado la presencia de 3,200 litros por segundo de aguas negras que se vierten al río Pánuco, a su sistema lagunario y al mar. En el caso específico de Altamira, por si fuera poca la contaminación (que tanto alegan los industriales que no existe ahí) también están las marismas, que son cuerpos de agua dulce que se han utilizado como depósitos de aguas negras, de aguas pesadas de la industria y de escurrimientos, lo que ha devastado a este entorno natural.

Por si fuera poco en Tampico y Madero existen dos ex basureros que sólo fueron tapados, es decir no fueron saneados antes de contaminar no sólo a grandes extensiones de tierra en donde se tiraba la basura sin ton ni son, sino que además se ha filtrado esta contaminación a los ríos y lagunas que se encuentran a un costado de estos tiraderos. por cierto que en el caso de Madero sigue aún funcionando como basurero, a pesar de que ya había sido clausurado desde hace un par de años.

pero si se critica a la industria establecida en Altamira, habría que mencionarse que de vez en vez tienen "accidentes" o emisiones de sustancias tóxicas al ambiente, de lo que pueden dar cuenta los vecinos de los industriales, que para acabarla de amolar es una de las poblaciones más pobres del estado.

También se tendría que hablar de la Refinería Francisco I. Madero que ya se encuentra en muy malas condiciones y cuyo mantenimiento es un misterio, tanto para la ciudadanía común como para los cada uno de los siete mil obreros que día a día ponen su vida en peligro. El incendio del pasado 29 de julio en un tanque de combustible en el interior de esta refinería, es otro más de los ejemplos de que Pemex está muy lejos de tener un buen estándar de seguridad en su refinería.

Habría que denunciar también las constantes fallas que Pemex tiene en sus instalaciones de ductos, que pasan por debajo de fraccionamientos habitacionales, escuelas, gasolineras, etc; justamente en los municipios de Madero y Altamira; en lo que cualquiera puede creer que se trata de una bomba de tiempo.

Con un panorama de esta naturaleza, un habitante del sur o norte de Tamaulipas bien podría predecir su muerte; por cáncer gracias a la contaminación; por un "accidente" que se podría agradecer a los industriales o a Pemex...o de risa si es que escucha a las autoridades o a los industriales repetir que "no pasa nada".

 

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