El ex hospital
Mario Alberto Gámez
“La arquitectura es música congelada”
Arthur Schopenhauer, filósofo alemán
En 1934 se colocó la primera piedra del edificio del ex hospital civil de Tampico, se trata de una roca angular con un tubo sellado, en cuyo interior se encuentra un pergamino con el texto en latín: “Sedare Dolorem Opus Divinum” (Quitar el dolor es obra divina), acompañado de las firmas de autoridades y médicos presentes de la época.
Originalmente se pensó en una gran estructura con la forma de la letra “H”, pero los recortes presupuestales por la segunda guerra mundial lo dejaron en una “T”.
Desde sus inicios, esta magnífica obra de arquitectura fue pensada en grande, para una gran ciudad, como el Tampico antiguo.
El año pasado una inusual, pero histórica consulta pública, hizo que el gobierno del estado (como propietario del inmueble) comenzara a trabajar en su rescate, cuando ya había voces, como la del alcalde de la ciudad que se pronunciaban por derrumbarlo.
La comunidad cultural de la zona hizo su chamba y sus esfuerzos se vieron coronados con la determinación de rescatar el inmueble para hacer de él un patrimonio histórico de la ciudad.
Desde hace más de dos décadas, el edificio abandonado ha sido de todo; vivienda para menesterosos, oficinas de la Policía Ministerial del Estado, Anfiteatro, bodega del municipio y hasta velatorio del DIF.
La antigua estructura con ya más de 60 años de antigüedad deberá recibir un gran esfuerzo de ingeniería para preservar el estilo “Art Déco Marino” de aquellos años cuando, por cierto, quien ejecutó la obra de construcción original fue el Gremio Unido de Alijadores.
El Ex Hospital Civil de Tampico es un edificio declarado artístico por el Instituto Nacional de Bellas Artes y tiene una iconografía reconocible desde el Río Pánuco y la Laguna del Carpintero. Desde su azotea se puede observar la ciudad de Pánuco, el puente Tampico, la playa de Miramar y en días claros el Cerro del Bernal, lo que lo convierte en el mejor mirador de la región.
Por ello no deja de ser muy interesante que el proyecto de restauración contemple no sólo el rescate del edificio, sino todo un corredor cultural que incluya a la Casa de la Cultura (Antiguo rastro municipal), las viejas instalaciones del IRBA, el Auditorio Municipal y algunas plazas como la que se encuentra justo frente al edificio de MILENIO Diario de Tampico (ex casa Mata), en donde se instala cada sábado desde hace ya cuatro años el Jardín del Arte.
La consulta pública del 2007 estableció que en el ex hospital deberán instalarse oficinas públicas, áreas de esparcimiento y un estacionamiento, un proyecto que concuerda con lo que ya tiene contemplado el gobierno estatal y municipal, y en donde no se descarta además la instalación de comercios y restaurantes, para todos los visitantes puedan apreciar la belleza natural de la región desde el precioso mirador que posee la estructura.
No son pocas las solicitudes por parte de arquitectos, ingenieros y gente del ámbito cultural que han impulsado reunir la información necesaria para proponerlo, ante la Organización de Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (la UNESCO) como un inmueble digno de ser patrimonio cultural de la humanidad…¡imagínese!
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