Ganará el que hizo la tarea

"En política siempre debemos optar entre dos males"

Christopher Morley, político inglés

 

Los resultados de las últimas encuestas que han colocado al Partido Revolucionario Institucional y a su candidato a la gubernatura Rodolfo Torre Cantú en los primeros lugares con por lo menos más del cincuenta por ciento de las preferencias electorales, es el resultado de un largo trabajo que viene de muchos meses atrás, pero también de la inmadurez de los partidos de oposición como el PAN y el PRD.

El PRI ya venía trabajando desde antes en el empadronamiento y censo de su estructura partidista en Tamaulipas y su dirigente estatal el siempre polémico Ricardo Gamundi Rosas ha lanzado una serie de retos a la oposición, principalmente al PAN; y no ha dejado de repetirles que el tricolor se llevará el "trailer completo" en la elección del 4 de julio.

Dicharachero, cínico y fanfarrón, Gamundi no repara en estadísticas y se llena la boca en gritarle al mundo, que el PRI tiene en el estado a más de 600 mil tamaulipecos enlistados en sus bases de datos y ya "credencializados" con una tarjeta que además, sirve para un gran número de descuentos en cualquier cantidad de bienes y servicios. El proceso de selección de los candidatos del PRI fue casi casi limpio, sin muchos daños al interior (aparentemente) y sólo con la fractura de uno que otro que brincó  al oposición, como el caso de Magdalena Peraza y José Luis Vargas en Tampico y Altamira, respectivamente.

En el PAN y PRD en cambio, a 15 días de que inicie la elección, es hora que todavía no tienen la lista completa de sus candidatos. Acción Nacional se convulsiona al interior; sus militantes han perdido la mística que les identificaba como un partido democrático y transparente, dos conceptos por los que anteriormente hasta la vida hubieran ofrecido y hoy deben lidiar con los fantasmas del dedazo vil y la ausencia de procesos transparentes para elegir a sus propios dirigentes. Su propio líder nacional puso en tela de juicio la infiltración de criminales entre sus filas y la división de grupos al interior pareciera irreconciliable.

El partido del sol azteca ha optado (¡por fin!) por un candidato a la gubernatura, después de que desecharon los nombres de Jorge Sosa Pohl, Lino Korrodi Cruz y Miguel Rubiano Reyna. En la jugada todavía está Francisco Chavira que difícilmente dejará que Julio Almanza se lleve la "gloria", lo que augura que la tormenta al interior del partido continuará.

A todo esto, ¿cómo ve la ciudadanía a los partidos?...simplemente no tiene ninguna credibilidad en ellos. la gente prefiere saber más del callo que tiene el portero de la selección nacional, a que cualquiera de los partidos políticos lanzó a un nuevo candidato, y aquí valdría la pena recordar que las elecciones serán en pleno campeonato mundial de futbol.

Aparte están el abstencionismo que en Tamaulipas supera el 50% de la lista nominal de electores, los apáticos que el día de la jornada electoral preferirán quedarse en casa antes de arriesgarse ante la posibilidad de hechos violentos y quienes para esas fechas estarán de vacaciones, fuera de su jurisdicción.

EL MENSAJE CORRECTO

Acuso de recibido el correo electrónico del buen doctor Agatón Navarro Quintana, quien crítica a mis palabras del pasado 8 de marzo cuando hablé en la columna titulada "Figura de Autoridad" de que los tamaulipecos queremos ver en el gobernador a un político que enfrente el tema de la inseguridad, pero justamente con acciones como las que hizo de pararse en plena Plaza de Armas, de recorrer a pie el centro de la ciudad, de escuchar y convivir con los tampiqueños. No coincido con enviar el mensaje equivocado del miedo, sino con difundir la confianza que debemos todos tener en salir adelante de este y cualquier otro problema que se nos presente con la unidad que nos caracteriza, en lugar de correr a escondernos debajo de la cama.

 

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