Eugenio y Rodolfo

"Muéstrame a un obrero con grandes sueños y en él encontrarás un hombre que puede cambiar la historia. Muéstrame a un hombre sin sueños y en él hallarás a un simple obrero".
James Cash Penny, comerciante estadounidense

Era apenas el inicio del sexenio de Eugenio Hernández Flores cuando tuve la oportunidad de entrevistarlo a poco menos de un año de haber asumido el poder. Se trata de la misma persona que hoy gobierna Tamaulipas a sus anchas y que poco o nada quizás, ha cambiado desde entonces, excepto en la altura de miras.
Yo lo percibí entonces como un político capaz, pero tímido de estirar las riendas del estado, lo que ha cambiado radicalmente, al grado de que si en aquel entonces me hablaba de dejar la política al término de su administración, hoy ya se le ubica dentro de los primeros planos nacionales en el próximo proyecto de gobierno en México, cerca, muy cerca del mexiquense Enrique Peña Nieto y todos sabemos lo que eso significa.
La frialdad de la estrategia priista está muy lejana de la "calentura" que se manejó de varios aspirantes a la precandidatura que tiene (desde hace más de 5 años) Rodolfo Torre Cantú y que mantuvo una falsa expectación en torno a este destape.
La realidad es que la estrategia del hombre fuerte de Tamaulipas, estuvo fríamente calculada desde hace ya mucho tiempo y trasciende los límites del presente sexenio e incluso de Tamaulipas, pues es un proyecto mucho más ambicioso que eso.
Ya verá usted que con el tiempo poco a poco se van concretando proyectos importantes que en seis años serían impensables, como carreteras, desarrollo de infraestructura gubernamental y no se diga turística.
Es por ello que lo que ocurra en torno a la elección será mero trámite, pues este mismo proyecto dejó bien planteada una estrategia de fortalecimiento al máximo del Partido Revolucionario Institucional y un debilitamiento implícito de toda la oposición al grado de hacerla débil e inoperante.
La estrategia hasta ahora va viento en popa, con un PRI que arrasa en las encuestas porque el ciudadano no percibe en la oposición estatal (ni nacional) una figura de fortaleza que ofrezca certidumbre y confianza al electorado, y porque el propio PRI bajo la operación de cinismo de Ricardo Gamundi Rosas ha construido una estructura en donde (casi) todos tienen juego dentro del sistema y un censo jamás visto en Tamaulipas que rebasa ya los 600 mil tamaulipecos que pueden presumir que son abiertamente priístas, lo que en un escenario de abstencionismo sería definitivo en favor del tricolor.
Y por si acaso no descarte usted que en un escenario de cinco candidatos a la gubernatura, alguno de ellos "decline" en favor de la alianza del PRI-PVEM-PANAL. Por cierto que este mismo fin de semana fue ratificada (como era de esperarse) la precandidatura del altamirense Armando Vera García a la gubernatura del estado por el Partido del Trabajo.
El trabajo de cabildeo que ha iniciado desde la noche misma de su ungimiento, ocupa a Rodolfo Torre en un recorrido que inició en Victoria, siguió en Nuevo Laredo y lo trajo a Tampico simplemente para confirmar el proyecto de continuidad que ya está en marcha y que ahora unificará a todos en la causa victorense.
Por cierto que la visita de Rodolfo Torre Cantú a Tampico el sábado fue muy bien aprovechada por el jefe de la Oficina Fiscal del Estado en Tampico, Gustavo Torres Salinas que sin empacho y con el respaldo de su grupo político alzó la mano y pidió ser tomado en cuenta para contender por el PRI como candidato a la presidencia municipal de Tampico.
Casi al mismo tiempo en Altamira quedó al descubierto la estrategia de represión por parte del municipio hacia la figura del ex alcalde Juvenal Hernández Llanos, quien junto a Juan Genaro de la Portilla Narváez impulsan la precandidatura de José Luis Vargas "El Chilero" rumbo a la presidencia municipal...o por lo menos eso se rumora.

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