Región violenta
Mario Alberto Gámez
“Hay algo que Dios ha hecho mal.
A todo le puso límites, menos a la tontería”
Konrad Adenauer, político alemán
Aunque los alcaldes de la zona conurbada posen frente al nuevo helicóptero de la Policía Metropolitana con una gran sonrisa y mostrando el pulgar (como si estuvieran en campaña), la realidad es que la inseguridad ha hecho presa a la ciudad, sin que este nuevo artefacto pueda consolidarse como “la salvación” del problema.
La gestión por parte de los alcaldes Fernando Azcárraga López de Tampico, Guadalupe González Galván (y Erasmo González) de Madero y Juvenal Hernández Llanos de Altamira fue tan lenta que apenas podrán ver algunos resultados de su implementación antes de dejar sus cargos dentro de algunas semanas.
Eso sí, la información sobre la aeronave fue motivo de páginas y páginas en los diarios locales y de grandes espacios en los medios electrónicos, principalmente promovidos desde el ayuntamiento de Tampico.
Se informó de todo; desde que ya se estaban haciendo los primeros trámites hasta cuando fueron los alcaldes a la unión americana para ver el modelo, que si se haría un hangar o no, que cuál sería su costo, que quién sería el piloto, etc.
Y mientras las autoridades municipales de la zona conurbada hacían las veces de importadores llenando trámites aduaneros, la delincuencia seguía haciendo de las suyas: los asaltos a los bancos a plena luz del día y en la Avenida Hidalgo se incrementaron considerablemente.
Se reportaron también más robos a empresas y comercios, asaltos a mano armada y la delincuencia juvenil hace lo que quiere en las calles.
Claro que los números oficiales bien pueden maquillarse y mostrar una realidad muy diferente al día a día de las calles, pero el mejor parámetro es el de su propia percepción. Cuándo fue la última vez que escuchó la expresión “en Tampico se vive con mucha tranquilidad”?...la realidad es que la serenidad y la paz que hace algunos años predominaba en la región ha quedado en el pasado y ha permitido que reine la intranquilidad y los hechos violentos.
Tampico y su zona conurbada se ha incluido ya abiertamente en el mapa de la delincuencia y es, como anteriormente se veía en determinadas zonas del país, una estadística más de la violencia, con o sin helicóptero propio...¡imagínese!.
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